Videoclase
La vulnerabilidad social es considerada por muchos como un factor claro que genera delincuencia. Sin embargo, dicha relación no es clara.
Las personas que viven en situaciones de vulnerabilidad y exclusión social no son, de por sí, delincuentes. La vulnerabilidad es una situación en la que los individuos que la experimentan tienen dificultades para mantener, al menos, alguna de sus relaciones de trabajo, familia y ciudadanía. A mayor dificultad en el ambiente, mayor vulnerabilidad se produce en la vida de las personas. La situación de vulnerabilidad es previa al delito y no lo obliga. No tiene por qué ocurrir el delito. El delito no deviene de la situación sino de la decisión de un agente en la situación. Concretamente, el delito se produce como una acción asociada a un rol social situado.
¿Tiene que haber un cierto nivel de vulnerabilidad social para que se produzca un delito? No hay todavía datos que permitan confirmar este supuesto. El delito no tiene por qué asociarse a una situación concreta así en general porque el individuo es un sujeto-actor. Y, por tanto, decide cómo actuar. Es más, el individuo crea su rol social dentro de los límites de posibilidad con los que se encuentra devenidos de su experiencia social. Aún así, hay ciertos delitos que vienen asociados a situaciones de vulnerabilidad en nuestras sociedades. Las razones de por qué ocurre eso es lo que habrá que entender adecuadamente.
Juan José Villalón Ogáyar profesor de Sociología General, UNED